62 Velatorio, funerales y cabezada

Cuenta la anécdota de la abuela de un cuñado, de Fitero: se la dio por muerta, pero se levantó durante el velatorio y aún vivió otros tres días más. Explica qué es “dar la cabezada”: durante los funerales se ponía a la persona fallecida en el pórtico y la familia se colocaba al lado. Entonces, la gente que llegaba a la iglesia daba el pésame a la familia y se saludaban con un gesto de la cabeza, una pequeña inclinación (“la cabezada”).

secuencias de Jesús Vergara Oyón

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